Tapones benéficos: ¡Súmate!

Se acabó la Navidad, y adiós a las obras benéficas.

Las televisiones dejan de anunciar sus múltiples campañas, todas las recogidas navideñas de alimentos, juguetes y ropa se acabaron. ¡Pero no! No podemos conformarnos con eso.

Estoy segura que campañas de recogida de alimentos, juguetes y ropa hay durante todo el año, el problema es que no sabemos cuándo, cómo, ni nada.

Aportemos nuestro granito de arena siempre que podamos.

Desde hace un tiempo existen muchas campañas de recogida de tapones, que sirve para salvar muchas vidas (como es en el caso de enfermedades que tienen que ser tratadas u operadas, y esas personas no pueden costeárselas).

Seguramente en vuestros pueblos y ciudades,  habrá alguien que se ha sumado a la recogida de tapones para poder pagar esa operación que no se puede costear.

¡Infórmate! Si lo haces, no solo ayudas a esas personas, sino que estás reciclando esos plásticos.

¡Súmate!

Plan Blonia: Desesperados

Un título algo extraño, que llama a título de película…sin embargo, como siempre la realidad supera la ficción.

Implantaron el Plan Bolonia, para que las universidades de España fueran a la par que el resto de la Unión Europea, pero no se dieron cuenta, o no quisieron darse, de que los que peor sufrimos las consecuencias de este cambio, somos los estudiantes de licenciaturas en extinción.

Es muy fácil implantar un nuevo modelo, al mismo tiempo que se extingue otro, sin percatarse de las consecuencias.

No es lo mismo para un estudiante de grado que le cambien las convocatorias de exámenes, eliminando así las de septiembre, que a una persona de licenciatura. ¿Por qué? Porque a las asignaturas suspensas de otros años, los estudiantes de licenciatura, no pueden asistir a sus clases, teniendo solamente el derecho a examen. Mientras tanto, un estudiando de grado, aunque le afecte el cambio que estamos sufriendo, podrá asistir a esas asignaturas suspensas de otros años si lo desea.

¿Por qué este atropello? ¡Deberían pensar más en los estudiantes!

Y claro está, si se extingue una asignatura y las convocatorias de derecho a exámen, por ende te tienes que cambiar a grado, donde hay menor número de créditos en optativas (imaginaros casos en los que una persona se tenga que cambiar por un par de asignaturas extinguidas y el resto de la carrera aprobada), todo lo que ha invertido esa persona para los créditos de libre configuración y optativas, gran parte de ello, no habrá servido para nada (basándonos en tiempo y económicamente hablando, y no en el aporte que haya podido a nivel intelectual). Además esa persona tendrá que tener un nivel B1 en un idioma (inglés, francés y alemán) y si no lo tiene, deberá preparárselo para acabar grado, y todo por dos míseras asignaturas…

Mi queja también va por las personas que no podemos volver a cursar las asignaturas extinguidas y para más inri, nos quitan septiembre, que muchas veces es esa fecha la más apropiada para poder intentar sacárnoslas.

Pero bueno... de qué me quejo, si por lo que veo, el sector educativo va de mal en peor. A este paso, ¡seremos privilegiados los que estamos estudiando!